El Cueto Millaró o Brañacaballo (2182 m)
Ficha de la ruta
Zona geográfica | Norte de la provincia de León, entre Piedrafita y Pajares |
Entorno | Montañas calizas. Tojos o árgumas a la subida |
Tipo de ruta | Pista forestal en la mayor parte del recorrido, senda y trochas de ganado al final. |
Inicio/ fin | Millaró |
Distancia aproximada | Aproximadamente 8 Kilómetros. |
Tiempo aproximado | Entre dos y cuatro horas, dependiendo del estado de la ruta (hielo, nieve…). |
Desnivel | 750 metros |
Dificultad | Baja, aunque el desnivel es fuerte |
Observaciones | Debemos ir preparados de acuerdo con la estación. En invierno piolet y crampones. |
En la zona comprendida entre los puertos de Pajares y Piedrafita, nos encontramos con una serie de cumbres que superan los dos mil metros, y cuya cúspide es precisamente el Cueto Millaró o Brañacaballo, con 2182 metros sobre el nivel del mar.
Tres son los lugares desde donde podemos iniciar la ascensión: desde Piedrafita la Mediana, a través de una pista que nos deja en la base de la montaña, desde Tonín, donde pista y senda se pueden seguir hasta cerca de la cima, y desde Millaró, ruta que elegimos en esta ocasión. Cualquiera de las tres es interesante y puede dejarnos un excelente sabor de boca.
Desarrollo de la ruta
Inicialmente nuestro propósito era ascender la cumbre del Tres Concejos y desde allí continuar hasta el Estorbín, pero la existencia de unas obras sin aviso previo antes de Tonín nos hicieron cabrearnos bastante y renunciar al proyecto. En esa tesitura, decidimos optar por acercarnos a Millaró e iniciar la ascensión al Brañacaballo.
Salimos por la pista que desde Millaró se dirige al oeste y que asciende cómodamente, porque el desnivel inicial no es excesivo, aunque hay que ganar altura, bastante altura. Tras un largo recorrido de varios kilómetros, llegamos a una caseta en la que merendamos un poco, para iniciar la ascensión final. Para ello lo mejor es continuar hacia la collada que hay de frente y desde allí crestear hacia la cumbre. Se puede ir directamente hacia la cumbre, pero resulta más incómodo y pesado, porque es más pindio y hay zonas de piedras, además de nieve con bastante pendiente cuando realizamos la ascensión.
Tras una breve estancia en la cumbre descendimos por la cresta hasta otros picos que hay más abajo, y tomamos la pista que va a Millaró por el lado contrario de la ascensión, una pista sencilla, pero estropeada al final por distintos desprendimientos, aunque no hay problema en transitar por ella a pie.Mapa de la ruta
Película
